La nave espacial OSIRIS-REx de la NASA se prepara para regresar a la Tierra el 24 de septiembre de 2023, trayendo consigo la primera muestra de asteroide recogida en el espacio. Lanzada el 8 de septiembre de 2023, OSIRIS-REx viajó hasta el asteroide cercano a la Tierra Bennu y recogió con éxito una muestra de rocas y polvo de su superficie.
A su regreso a la Tierra, la nave liberará una cápsula del tamaño de una mininevera que contendrá las piezas recogidas en Bennu. Esta cápsula se lanzará en paracaídas hasta el Campo de Pruebas y Entrenamiento de Utah, perteneciente al Departamento de Defensa, donde estará el equipo de OSIRIS-REx para recuperarla.
En la última actualización, la nave se encuentra a unos 2,8 millones de kilómetros de la Tierra y viaja a una velocidad de unos 23,000 kilómetros por hora. El 17 de septiembre, la nave ajustó su trayectoria para precisar el lugar de aterrizaje de la cápsula de muestras, disparando brevemente sus propulsores para cambiar su velocidad en 7 pulgadas por minuto con respecto a la Tierra.
Los científicos de la NASA están ansiosos por analizar el material recogido de Bennu, que consiste en casi media libra de escombros y polvo de la superficie del asteroide. Esperan que este material proporcione información sobre las condiciones y la composición de los primeros días de nuestro sistema solar, arrojando luz sobre una época de hace aproximadamente 4,500 millones de años, cuando el Sol y los planetas se estaban formando.
Se espera que la cápsula de muestras soporte condiciones extremas, incluidas temperaturas más calientes que la lava y una de las segundas velocidades más rápidas jamás alcanzadas por un objeto fabricado por el hombre al entrar en la atmósfera terrestre. La cápsula entrará en la atmósfera a una velocidad 36 veces superior a la del sonido y se enfrentará al viento, la lluvia y otras condiciones meteorológicas a medida que se acerque a la superficie.
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