Figuras voluminosas -como las de “La siesta” – son las características de las pinturas y esculturas de Botero. Foto: X @ArtistBotero
El Tiempo confirmó el fallecimiento de Fernando Botero, el artista plástico colombiano más universal. El célebre pintor, escultor y dibujante, murió en su casa en el principado de Mónaco, donde se recuperaba después de haber sufrido recientemente una neumonía, según ha confirmado este viernes el periodista Julio Sánchez Cristo en W Radio.
Botero, quien nació en Medellín el 19 de abril de 1932 rompió todos los récords del arte, como 300.000 personas en el Palacio de Bellas Artes en México o 155.000 en el Museo de Bellas Artes de Bilbao.
Sus obras se caracterizaron por sus figuras voluminosas. Fue un autodidacta en todo el sentido de la palabra. “El arte debe producir placer, cierta tendencia a un sentimiento positivo”, afirmaba el propio Botero en 2019 en una entrevista con EL PAÍS. “Pero yo he pintado cosas dramáticas. Siempre he buscado coherencia, estética, pero he pintado la violencia, la tortura, la pasión de Cristo… Hay un placer distinto en la pintura dramática, la pintura misma. El gozo mayor de la pintura, la belleza, no pone a reñir lo dramático y lo placentero”, afirmaba entonces.
Su pintura también le sirvió de terapia, como es el caso de los cuadros donde aparece Pedrito, el hijo que perdió en un accidente de tránsito.
Con información de elnacional.com y elpais.com
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